La moda de la comida sana
Cuando lo dices ya parece cliché, sin embargo es una realidad latente que cada vez los productos sanos se encarecen más y más; no todo es queja, afortunadamente también con mayor frecuencia, encuentras más lugares y productos saludables.
Es de todos sabido que cuando se incluye la palabra sano/orgánico, va detrás de un alto precio, lo cual sin duda ha marcado una segregación más en nuestra sociedad (cómo si tuviéramos pocas!).
Ir a lugares saludables alimenticia y espiritualmente, también se ha convertido en moda de unos cuantos, te tomas la foto, compartes en tus redes y ya formas parte de uno de los grupos más cool de la actualidad! No intento sonar grosera o desalentadora, pero si quiero ser muy sincera respecto a lo que yo y mucha gente vemos.
La verdad detrás de la selfie de comida sana, es que muchas veces ni siquiera es comida sana en realidad! Y bueno, eso es culpa en gran parte de los restauranteros, que inundan el local de ideas sanas, pero al final ofrecen productos poco o incluso nada sanos.
Me ha tocado decepcionarme de muchos lugares “sanos” cuya fama alcanza mis redes sociales y cuyas frases saludables y espirituales, inundan mi cerebro y hasta me hacen salivar! Cuando vienes a ver, estas sentado pidiendo un sándwich de pan “de granos” (que cuando lo pruebas descubres que es el típico pan del súper lleno de malos ingredientes), como en cualquier lugar “poco sano” (arguyendo a los adjetivos actuales) y acompañado de un jugo de nombre exótico y que cuando le das el primer sorbo te encuentras que con una mezcla de algunas frutas y vegetales, con agua o jugo de naranja y molidos en una licuadora de baja potencia!, eso sí la cuenta nunca decepciona, más bien entristece a la cartera, y generalmente las instalaciones tampoco, pues casi siempre son lugares muy lindos y con decoraciones muy atractivas.
Y es qué en esta ola saludable, envuelta en la misma cobija de desinformación o información desactualizada, encontramos que un sándwich en pan de centeno (comercial) se sigue considerando sano, encuentras que venden hotcakes de avena y el sabor los delata que es de la harina de cajita (esa que tiene algo de avena, y el resto de harina blanca, y con todos los químicos necesarios para un hot cake perfecto).
Un lugar que ofrece jugos verdes, que ni es jugo ni es verde (no literalmente), porque tiene más de más fruta que hojas verdes o vegetales y porque es preparado en licuadora. Y no es que todo esto esté mal, es un paso, todos empezamos poco a poco, la queja es porque se anuncian saludables, la queja es porque no se informan del tema y a mi eso me parece falta de educación y profesionalismo, es como cuando tienes que exponer una clase o una conferencia y no leíste nada ni preparaste material adecuado para tus interlocutores.
Dentro de toda esa ola sana, aún hay muchos mitos por tumbar, muchas ideas por cambiar, muchos hábitos por mejorar, y si queremos ser participe de este hermoso movimiento, tenemos que prepararnos, tenemos que estar a la altura de un tema tan importante como este.
Que pasa cuando los lugares son verdaderamente sanos?, pasa que te vuelves cliente cautivo, pasa que valoras el tipo de ingredientes que usan, agradeces el tipo de bebidas y platillos que ofrecen!, generalmente son lugares donde se sienten las vibraciones altas, da gusto conocer lugares así y más aún da gusto comer ahí.
Si esta no fuera la página de #GingerMint, seguramente sería una página sobre lugares de comida sana por visitar :D. Nos leemos pronto.
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